En su tercera entrega (y ojalá la última) Thor ciertamente divierta a sus fans y llena los bolsillos de Marvel pero deja de lado los conflictos que hicieron crecer a este héroe.

VotZ: Soy de la minoría que considera que las películas de Thor están entre las mejores del creciente catálogo de Marvel. “Thor”, la primera, me gustó por ser sencilla y entretenida; Thor me cayó bien, me reí, me emocioné, y salí del cine hecho un fan. “Thor, un Mundo Oscuro” me pareció menos entretenida pero más interesante, porque se enfocaba en la ruinosa relación entre Thor y Loki después de los eventos de “Los Vengadores”. Así que entenderán si les digo que tenía buenas expectativas para Ragnarok, y espero que comprendan que no se cumplieron.

No quiero decir que la película sea mala, para nada. Esta es tal vez la película más divertida que ha tenido el vikingo espacial, y toda la producción de la película me parece impecable; sin embargo el guión quedó debiendo. Thor nunca se ha caracterizado por tener historias profundas, pero tanto la primera como la segunda película trataban temas sumamente importantes para Thor como personaje: su arrogancia y egoísmo en la primera, y la relación con su hermano y con su responsabilidad con su reino en la segunda. La verdad no sé qué esperaba de Ragnarok en este sentido, la historia parecía haber llevado a Thor a madurar y superar sus defectos más evidentes, por lo que no se me ocurría de qué manera se superaría en la última entrega. Ahí está el detalle.

Thor ciertamente es el protagonista de la historia, pero no está íntimamente involucrado en la trama. Aunque claramente él debe salvar a Asgard de Hella, Thor solo reacciona a conflictos externos (Surtur, Hella, Hulk) sin enfrentarse a ningún conflicto interno. Esto hace parecer que Thor está inmerso en la historia por casualidad y no por elección propia.

Majo: De hecho eso que decís es algo que me confundió, porque en un momento el protagonismo de Thor no es tan definido, y la película en lugar de concentrarse en un personaje como que trata de darle un poco de atención superficial a todos. En cierta forma, lo que escuché de que Marvel quería inclinarse por la fórmula de Guardianes de la Galaxia hace la película muy divertida pero casi que la vuelve desechable… La vi una vez, me reí de los chistes, la música vintage me rescató Immigrant Song de Led Zeppelin de aquella terrible escena de Shrek 2, y ya.

Entonces, ¿dónde quedó la épica de Thor como héroe? ¿O su conflicto con Loki o su relación con Jane Porter? Parece que el paso entre películas borró muchos de los conflictos que habían hecho crecer a Thor, e incluso a Loki ya no es un antagonista sino un personaje que queda cómodo para meter uno que otro chiste o ir a alcanzarle algo a Thor…

VotZ: Si, de pronto cambiaron a casi todo el elenco de las películas anteriores por personajes que, a pesar de ser muy divertidos, solo están ahí para participar en las peleas y decir chistes. El logro de Guardianes de la Galaxia es que logra hacer que entendamos y simpaticemos con sus personajes en poco tiempo, y todos ellos tienen interés en el conflicto principal de la historia. En Ragnarok, el equipo de los “Revengers” tienen química y carisma, pero les falta empatía.

Majo: Tal vez el punto no es que les falte empatía precisamente, sino que los chistes minimizan mucho el conflicto entonces no es posible para el público entender los conflictos porque el guión no termina de decidir qué es lo más importante. El fin del mundo no se siente urgente, la muerte de Odín causa solo un enojo temporal con Loki que se olvida pronto, y ni siquiera la destrucción de Mjolnir a manos de Hella le produce más que una leve melancolía, que necesita se resaltada por otro personaje o pasaría inadvertida. La escena más conmovedora de la película es la conversación entre Thor y Hulk sobre su temperamento y la frustración de fallar a pesar de su poder; es el único momento en que Thor se ve interesado en un problema personal o de un amigo, y me hace empatizar con él y querer verlo triunfar. Es una lástima que no pueda decir lo mismo del final de la película, en donde Thor causa la destrucción de su mundo y se resigna a ver a  Asgard arder desde una nave espacial, pero con una actitud resignada y hasta optimista que no llego a entender.

VotZ: De hecho la “moraleja” de la película es también bastante confusa. En el acto final la película enfatiza que “Asgard es su gente, no su tierra” y esta parece ser la epifanía a la que Thor llega en su hora más oscura pero… ¿Acaso él ignoraba esto? Tanto el descubrimiento de la sangrienta historia de Asgard como el valor de sus ciudadanos no parecen afectar ni cambiar a Thor de ninguna manera; me cuesta creer que ignorara el valor de su gente, y la verdad sobre las conquistas de Odín tampoco parece cambiar su forma de pensar.

Ciertamente nuestros problemas con la película no son con Chris Hemsworth  como Thor (Majo: Rajado que el corte de pelo le cayó muy bien) ni con Taika Waititi como director; la película es divertida, emocionante en su acción y muy colorida, pero sus personajes resultan superficiales y poco interesantes. El guión no ofrece un crecimiento personal para ninguno de los personajes, solo misiones que cumplir y oportunidades para redimir su pasado trágico, sin que esta venganza se sienta significativa ni catártica Verla en el cine valió la pena por los efectos, pero no es una película que queramos volver a ver.

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