Angélica y Jimena querían una luna de miel distinta: recorrer Centroamérica con la intención de formar redes de contacto y colaboraciones entre comunidades. Este es el blog de su viaje.
Foto de nuestra boda. Fotografía por Karla Cordero.
¿Y esto qué?
Angelica y yo nos casamos en agosto. Después de una ceremonia simbólica hermosísima, decidimos dejar nuestra luna de miel para el segundo semestre del año – cuando tuviéramos vacaciones.
Pensamos que con la plata que logramos recaudar y que metimos en un depósito a plazo fijo en el banco nos alcanzaría para recorrer Centroamérica (que ambas conocemos muy poco o nada) durante un par de meses.
Pensarán que somos millonarias para poder irnos meses de viaje por varios países de luna de miel. Ni cerca. Sin embargo, nuestra idea de viaje tampoco se acerca a la de las lunas de miel que hemos conocido. Buscamos hacer couchsurfing (por medio del sitio www.couchsurfing.com, nuestra idea era viajar y y descubrir los países con locales y sin necesidad de pagar hoteles) ya que yo he hospedado y he sido hospedada de esta forma.
También buscábamos hacer redes feministas/LGTB/decoloniales/ambientales o cualquier cosa que nos pareciera interesante. Por eso, nos afiliamos a organizaciones o gente amiga que nos hospedara o nos diera ideas de dónde hacer voluntariado por unos días.
Algo encontramos antes de salir, pero el resto lo descubriríamos en el camino. Empezaríamos en Nicaragua y a subir hasta que la plata alcance, el regreso volaremos con millas acumuladas.
¿Por qué compartir?
Nuestra idea al crear redes es para fortalecerlas y abrir puertas con el fin de localizar oportunidades de proyectos y amistades regionales. Además, la idea de escribir un blog contando que hemos hecho, visto, conocido y aprendido es quitarnos el miedo de nuestros países vecinos. Vernos, conocernos, crecer, más allá de las fronteras. Y bueno, dos mujeres pareja viajando solas sin mucho rumbo por Centroamérica, de eso debe salir algo… creo.
PD: También pueden leer el de mi esposa que lleva el suyo y escribe menos detalles (y más sentimientos).
